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Estando lejos del país y ocupada en asuntos diversos, muchas veces el tiempopara ver noticias y enterarse de lo que está pasando en Panamá puede ser muy corto. De allí que por el tiempo que dure la ausencia uno está igualmente ausente de los acontecimientos, sean banales o importantes. Uno no se entera.
Ahora bien, si el asunto tiene que ver con un juego de la sele, es imposible no enterarse, pues la casilla de Whatsapp se engorda por instantes hasta explotar. Es así como basta llegar a un lugar que tenga wifi para que el teléfono se vuelva loquito, y no ha terminado uno de conectarse cuando aparece en la pantalla que uno tiene 145 mensajes. ¡Ojo! Que ninguno es de vida o muerte y todos podrían esperar para ser leídos, pues el 99% es de memes, videos, cuentos cortos y otros largos gracias a los cuales podemos comprender cuál es el estado de ánimo de la población en general.
Junto a la felicidad de haber obtenido un cupo para ir a Rusia, vemos el desbarajuste que la acompaña. Las avenidas vueltas un chiquero, las historias de la bulla que plagó la ciudad hasta bien entrada la madrugada y, por supuesto, el plumazo con que el presidente decretó un día libre totalmente innecesario, porque por más que busco no encuentro razón suficientemente válida para proteger una “goma” que supongo sería producto de una tarde libre “para ver el juego en paz”.
En otro momento llega una fotito de los magistrados de la Corte manifestando que no podrán juzgar a Martinelli por falta de evidencia, mientras que en la comarca hay un montón de familias afectadas por deslaves producto de las lluvias. En los hospitales la gente grita desesperada porque tras haber esperado seis meses para conseguir una cita, los médicos no llegaron porque… ya saben… hay que celebrar el fútbol. Aparentemente eso no duró mucho en las noticias, porque persistía la información sobre el juego de fútbol.
Yo, acá, desde lejos, me pongo a unir todos esos parches como si fuera un edredón de los que cosían las bisabuelas, con retazos de tela, y les confieso que la imagen no me gusta. Y eso que solo he visto las noticias a pedazos. Imagínense lo que estaría viendo si tuviera la información completa. Un cuadro oscuro, con una que otra escarcha por aquí y por allá. Hago un esfuerzo inmenso por hacer que las imágenes se organicen de forma tal que aparezca un paisaje apacible como el que bien podría vivirse en Panamá gracias a todas las riquezas que tiene, pero no puedo.
No hay orden ni disciplina, cada cuadro parece tener vida propia y se coloca donde le da la gana. Es una anarquía total, alimentada por un populismo tan pasado de moda que no alcanzo a comprender de dónde proviene. ¡Ah, sí! Del gobierno, que no alcanza a entender que enseñar es mejor que regalar, y que exigir y disciplinar siempre da buenos resultados. Pero así está la cosa. En un caos total. Pero no debe ser motivo de preocupación porque, señores, ¡vamos para Rusia![/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
