La amistad es un valioso activo, pero ser fiador de un amigo es delicado. Implica una responsabilidad más grande que la de quien toma la deuda. Conviene diferenciar entre fiador y codeudor, conceptos que el común de las personas consideran sinónimos. No lo son.
El fiador es una persona que garantiza el pago de una responsabilidad financiera adquirida por otro, en caso de que la persona que endeudó no tenga cómo pagar; el fiador deberá hacerlo, pero siempre le avisarán que el otro no pagó.
Fiador o codeudor
Ser fiador es distinto a ser codeudor, pues el primero tiene una pequeña ventaja y es que tiene el derecho de que primero se le exija al deudor principal (con embargo de sueldo, inmuebles) y si no se logra el pago, se le exige al fiador. El fiador dispone de más tiempo relativo para “escapar” al compromiso, por así decirlo, al autoembargarse o cambiar el estatus del bien dado en garantía.
Si el fiador no paga y a usted le obligan a cumplir, luego podría demandar al que no pagó. Eso es casi un sueño, pues el que es mala paga o no puede pagar por alguna razón, ante la perspectiva de verse acorralado pone sus bienes a nombre de otros.
Otra estratagema de los irresponsables es hacer que la esposa les ponga una pensión para eludir el pago del compromiso y un embargo del salario.
Por su parte, el codeudor es codueño de la deuda del otro. Si el otro no paga, a usted no se le avisa nada de la situación. Simplemente le demandan para que pague y si accedió a ser fiador solidario tendrá que pagar toda la deuda, y si hay otro codeudor, en teoría, cada uno paga la mitad.
Digo la mitad del compromiso; pero he visto casos en que a ambos fiadores se les cobra la totalidad de la deuda. Por otro lado, tanto al fiador como al codeudor demandados se les coloca una mala nota en sus reportes de crédito de la Autoridad Panameña de Crédito (APC).
Esto implica dos grandes consecuencias: embargo de sueldo o demás propiedades para tomarlo como garantía del pago, y podrían negarle crédito en entidades financieras.
¿Esa persona sería su fiador?
Es bueno hacerse estas preguntas antes de decidir si ser o no ser fiador o codeudor: – Evalúe a la persona que se lo solicita, como si usted fuera a prestarle: ¿Usted le prestaría plata?
– ¿Ella aceptaría ser fiador suyo?
– ¿Cuál es el valor del préstamo? ¿Por qué esta persona necesita un fiador?
– ¿Cuál es la relación de la letra del préstamo con respecto al sueldo de la persona que le pide ser fiador?
– ¿Cuál es la finalidad o propósito del préstamo?
– ¿Sabe usted por qué lo escogió a usted?
– ¿Conoce usted la situación de la persona en la Autoridad Panameña de Crédito?
– ¿El préstamo requiere por política un fiador?
Si bien uno podría pensar que pone en peligro la amistad, y así es, evite en lo posible ser fiador o codeudor de un amigo.
Solo hágalo con personas de mucha confianza. Con familiares muy cercanos, y aún esto es relativo. No con compañeros de trabajo ni con quien mantiene una relación amorosa no estable.