Seis de la tarde y partíamos desde la avenida 12 de octubre hacia el estadio Rod Carew para asistir al concierto de Romeo Santos en Panamá.
Las nubes grises sobre el cielo nos advertían la llegada de la lluvia. Alguien me alerto, a través de un mensaje por WhatsApp, que la ciudad estaba sumergida en un tráfico denso incluso desde la altura del Parque Omar. “Es por el concierto de Romeo”, supimos de inmediato. Mentalmente nos preparamos para ingresar a esa fila de carros sin saber que el tiempo que nos tomaría llegar al estadio sería parecido al que toma llegar hacia alguna provincia ubicada a 280 km de la capital.
El evento se realizaría en el complejo deportivo ubicado en la vía Centenario, por la cual transitan miles de personas cada día para dirigirse a sus casas en el área oeste de Panamá. Entre la hora pico, el concierto, las personas que se dirigían hacia sus hogares y la lluvia, nos tomó cuatro horas en llegar al estadio Rod Carew.
Se acercaban las 10 de la noche cuando logramos ingresar a nuestra mesa designada dentro del concierto que correspondía a la gira Fórmula Vol. 3. de bachatero neoyorquino Romeo Santos, de 41 años.
En el camino veníamos un poco preocupadas por la intensidad y prolongación de la lluvia. Afortunadamente, a nuestra entrada al estadio el clima nos propuso una tregua para disfrutar del concierto con un cielo despejado.
El show inició, con retraso, alrededor de las 11:30 de la noche. La incomodidad por las cuatro horas de camino, la lluvia y la espera se borraron de nuestra mente apenas el cantante apareció, vestido completamente de blanco, sobre el escenario para iniciar su repertorio.
“Han pasado cinco o seis años desde la última vez que vine a Panamá”, dijo en un momento el artista luego de saludar al público efusivo por sus canciones y de referirse a la calor panameña que lo recibía en el escenario.
Romeo Santos interpretó canciones de su reciente álbum Fórmula Vol.3, lanzado en 2022, como El Pañuelo, que canta junto a Rosalía. Además cantó sus clásicos como solista tales como Propuesta Indecente y El Perdedor.
La gran nota de la noche fue cuando, sentado en un trono sobre el escenario, cantó acapella diversos temas de la agrupación Aventura, que liderizó al inicio de su carrera artística hace más de 20 años. Canciones como Obsesión, La Boda, Un beso fueron coreadas por el público. Yo las canté casi a gritos de la emoción.
El artista, que durante su show tuvo tres cambios de vestuario, dio un concierto de dos horas. Al salir del estadio, ya de madrugada, el tráfico seguía lento en dirección hacia Panamá Oeste. Las horas en camino continuarían para varios.
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