1. Alquilé mi apartamento, pero quiero seguir usando el gimnasio de mi edificio, ¿hay algún problema con eso?
Cuando un propietario alquila su casa o apartamento, cede a favor de su inquilino el derecho de uso y goce de las áreas comunes. Por ende, no está permitido ni es correcto a los propietarios que alquilan a favor de terceros sus viviendas seguir utilizando las amenidades y áreas comunes.
2. Donde vivo, el cobro de gas se hace después de una inspección en la que se revisa la cantidad de apartamentos que usan gas y su tamaño, cantidad de inquilinos y empleados que prestan servicio en la casa, y eso lo multiplican por un porcentaje: esa es la cuota de gas. Entiendo un cobro fijo por apartamento o que pongan un medidor, pero un estimado me parece ilegal.
El cobro de gas puede hacerse conforme lo apruebe la asamblea. Tengo edificios donde tenemos medidores y otros donde el consumo está incluido en la cuota de gastos comunes mensual. No me ha tocado administrar proyectos en los que se cobre un estimado. Sin embargo, al no estar indicado en la ley cómo debe cobrarse el gas, la forma como lo estiman en su edificio no parece ilegal, siempre y cuando haya sido aprobado por la asamblea de propietarios. Recomiendo consultar con su administración para que le indiquen cómo se decidió cobrar de esta manera y que le proporcionen copia del acta respectiva que avale este procedimiento.
3. Me gustaría saber qué se puede hacer para controlar el estacionamiento de visitas. En mi edificio, los estacionamientos dan hacia la calle y hay un bar enfrente que se ha adueñado de ellos. La administración ha optado por instalar “guarda parking”, pero la gente los sigue invadiendo estacionándose horizontalmente. Por otro lado, hay inquilinos que usan el estacionamiento de visitas como si fuera el suyo, dejando el carro toda la noche estacionado.
Lamentablemente, la falta de estacionamientos en los comercios y en los propios edificios tiene como consecuencia el mal uso de los puestos de visita. Los “guarda parking” son dispositivos que ayudan a controlar esto, pero requieren de la acción y presencia permanente del personal de seguridad. Si estos puestos están fuera de la vista del seguridad o si no se cuenta con personal suficiente, el orden en su uso se puede complicar. En el caso de propietarios que utilizan los puestos de visita como si fueran propios, la administración debe aplicar los llamados de atención y las sanciones que establezca el reglamento, y fomentar la conciencia entre los residentes.