Aunque todavía no hay estudios que indican la posibilidad de que una mascota pueda transmitir el coronavirus, sí se ha reportado que una persona que tenga el virus puede transmitírselo a su mascota, señala la médico veterinario Anaís Villarreal. Por eso se recomienda que así como se aisla en casa a la persona que resulta positiva por Covid-19, los perros y gatos también deben estar alejados de ese miembro de la familia.
La cuarentena establecida en Panamá ha cambiado la rutina de muchas personas, así como también la de las mascotas, que aunque no saben lo que está pasando, “sienten todos los cambios que hay en casa”, acota Villarreal.
Hay que tratar de sacar a los perros cerca de la casa para que hagan sus necesidades. Si el perro estaba acostumbrado a ir al parque o salir con mayor frecuencia, Villarreal aconseja intentar hacer actividades dentro del hogar para que pueda quemar esa energía como lo hacía antes.
Patitas limpias
Para la limpieza de las pata, cuando un perro regresa de la calle a la casa, Anaís Villarreal sugiere utilizar toallitas húmedas especiales para mascota, que tienen el PH apropiado para su piel. También se puede usar toallitas de bebé que sean neutras, hipoalargénicas y sin fragancia, o se puede pasar una toalla húmeda y luego secar muy bien las patas.
Si las patitas quedan húmedas constantemente, podría ocasionar una infección. Por eso no se aconseja lavarlas frecuentemente con agua y jabón. Tampoco aplicar alcohol ni gel alcoholado.
Covid y las mascotas
Alergias por productos de higiene
La médico veterinario Anaís Villarreal es especialista en dermatología veterinaria, por lo que en su consulta ha atendido casos de crisis alérgicas relacionadas al uso de productos concentrados de limpieza.
En los perros, las alergias se presentan con picazón, estornudo, el animal se comienza a rascar constantemente, a lamer las patitas, a restregarse la cara, o se empieza a caer el pelo. Recomienda que al usar algún desinfectante, líquido o en aerosol, alejar a la mascota y optar por aquellos productos que tengan la menor cantidad de fragancia posible. ”El problema no es el producto sino la fragancia que queda después”, detalla.