Beatriz de York y Edoardo Mapelli Mozzi se iban a casar el 29 de mayo; Katy Perry y Orlando Bloom lo harían en Japón durante el verano del hemisferio norte; Emma Stone y el guionista Dave McCary lo iban hacer el pasado fin de semana. Iban, porque estas tres parejas pospusieron sus planes debido al coronavirus.
Italia, famoso lugar de bodas de destino entre los estadounidenses por hermosos paisajes de lugares como Venecia o Verona, vivió una avalancha de cancelaciones en febrero. Muchas novias decidieron volver a Estados Unidos, pero al poco tiempo dejó de ser una opción; la epidemia también había llegado allá.
Vivian Viggiano de The Planners Firm, en Panamá, cuenta que tan pronto se hizo evidente que Panamá iba a enfrentar la crisis de salud, “y por seguridad de los clientes y los proveedores”, ella como wedding planner empezó a hablar con las novias sobre disminuir el número de invitados. En primera instancia, los eventos con más de 50 personas quedaron prohibidos por decreto, pero esa misma semana se restringieron todas las aglomeraciones. Habría que reagendar la ceremonia.
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Eventos corporativos y sociales también se suspendieron. Posponer una boda tiene un significado aún más grande, pues es una fecha que se ha planificado con mucha antelación y que sus protagonistas esperan sea un día inolvidable.
Los primeros meses del año suelen ser de temporada alta para las bodas en Panamá, sobre todo para las que se hacen en la playa o en fincas. Esas celebraciones al aire libre deberán esperar al próximo año.
Hoy ni siguiera es posible ir solo al juzgado para una boda civil. En la página web del Tribunal Electoral, en la sección de preguntas y respuestas, se advierte que el registro civil tiene suspendidos los matrimonios hasta nueva orden. Tampoco se pueden tramitar, salvo excepciones, los certificado de soltería, uno de los requisitos para casarse en Panamá.
Cristina de Berguido, decoradora de eventos quien dirige una empresa junto a su madre Cuchi de la Guardia, tenía entre sus clientes a dos parejas del extranjero, con invitados que iban a viajar. Con fronteras cerradas esto se dificultad.
Añade que las bodas de abril, mayo y principios de junio que estaban trabajando, se han movido hacia más adelante, incluso algunas para el próximo año.
Sobre reagendar explica: “son muchos cosas qué hay que volver a coordinar: el lugar, iglesia, coordinador, decorador, música, fotógrafo, video, en fin…”.
Viggiano agrega que en cada boda pueden participar no menos de 20 proveedores. Una gran cantidad de personas llevan el sustento a sus casas gracias a esta actividad.
El estilista Roberto Bonner, quien tiene entre sus clientes a muchas novias, recuerda que al igual que las bodas, los quinceaños también se han suspendido. De estas celebraciones dependen muchos negocios que incluyen desde los que alquilan sillas y mesas, productores de video, músicos e incluso los negocios que venden los accesorios para la hora loca, en la Avenida B.
Sin bodas o eventos y ante el cierre de fronteras y comercios, la industria de las flores también está perdiendo. Holanda, el primer exportador de flores en el mundo, lanzó la campaña “Compra flores, no papel higiénico” para apoyar al sector, según una nota de AFP los floricultores han tenido que arrojar a la basura el 80% de su producción.
#BuyFlowersNotToiletpaper Dit is het moment om mooie bloemen of leuke plantjes te kopen voor jezelf en voor je vrienden, familie en buren! Fleur je huis en werkplek op met bloemen en planten en steun de sector!🙏🏼 ••• This is the time to buy a bunch of flowers or plants for yourself & your family, friends and neighbours! Cheer up your home and workplace, Spread the message using #BuyFlowersNotToiletpaper 🙏🏼 ••• #flowerboostchallenge #WestCountryMedia #Coronacrisis Thanks to: @royalfloraholland
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Reagendar, no cancelar
El consejo que tanto Vivian Viggiano como Cristina de Berguido dan a las novias es reagendar, y no cancelar el evento, aunque aún no se el final de la epidemia.
Ante un momento de incertidumbre y donde todo el mundo está afectado, habrá cambios en cuanto a las bodas de destino. En opinión de Vivian será necesario ser más creativos que nunca.
El fotógrafo de bodas Carlos Yap compartió en su cuenta de Instagram un video con el mensaje ‘volverán las reuniones, las salidas, los besos y los abrazos’, mientras al fondo los novios se abrazan, besan y son festejados por sus invitados.
Vogue España publicó la semana pasada una carta de la escritora Leti Salas a las parejas que han tenido que aplazar su enlace y que lleva por nombre Llegarán las flores. En su cierre dice: “Llegarán las campanas, llegará el día en que abráis los ojos y será el día de vuestra boda. Llegará el día de celebrar que sois una familia capaz de superarlo todo juntos. Y los meses de antes serán superpuestos por algunos de los momentos más intensos que viviréis en la vida”.
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