Era la alfombra roja de los premios Tony 2024, considerados como los Óscar del teatro, celebrados en el teatro David H. Koch, del Lincoln Center en Nueva York.
Brooke Shields apareció en la red carpet con un vestido amarillo, sin mangas y con escote pronunciado, de la diseñadora Monique Lhuillier. Bajo la basta de su traje de noche, la actriz de 59 años llevaba un par de Crocs amarillas, como su vestido, que al principio se escondían detrás de la tela de su atuendo, pero que luego ella misma mostró con actitud ante los fotógrafos.
Tres días antes del evento, Brooke se sometió a una cirugía en dos dedos su pie. Un día antes de los Tony, compartió una fotografía en su cuenta de Instagram mostrando un par de zapatos ortopédicos post operatorios. “Las fotos de los pies están a punto de subir de nivel...”, escribió con picardía la actriz estadounidense, conocida por su trabajo en películas como Pretty Baby y La Laguna Azul.
Para no perderse la alfombra roja y los premios (donde ella era una de las presentadoras) se hizo aliada de la comodidad sin disculpas y escogió lucir este tipo de zapatos, históricamente polémicos entre el público.
“Para nada soy del #teamcrocs pero en casos como ese, de su operación, siempre primará la salud y la comodidad. Bella esa señora, pasan los años y sigue siendo linda, elegante y sencilla a la vez”, escribió una seguidora en nuestra cuenta de Instagram (@revistaellas) sobre la elección de Brooke Shields.
“Después de los 60′s tenemos libertad de hacer lo que nos dé la gana”, comentó la artista panameña Olga Sinclair en este mismo post.
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