Con un traje de denim de Maison Margiela, una gorra de béisbol y un cadenón con la figura de Jesucristo, Kendrick Lamar subió al escenario de los Grammy para recibir premios por su tema musical Not Like Us.

Más que un simple look, su elección del Canadian tuxedo estaba cargada de significado.

El Canadian tuxedo es un conjunto completamente de mezclilla, generalmente compuesto por chaqueta y pantalón de denim. Su origen se remonta a 1951, cuando el cantante Bing Crosby fue rechazado de un hotel de lujo en Vancouver, Canadá, por vestir mezclilla. Levi’s, al enterarse, diseñó para él un esmoquin de denim en tono irónico. Así nació el nombre, asociando este estilo a la anécdota ocurrida en Canadá.

Canadian Tuxedo: el ‘look’ de denim de Kendrick Lamar y su significado en la moda afroamericana

Kendrick Lamar acepó el Grammy en la categoría Grabación del año. EFE/EPA/CAROLINE BREHMAN

En los años 60, los activistas del Student Nonviolent Coordinating Committee (SNCC), organización clave en la lucha por los derechos civiles, usaban mezclilla para solidarizarse con la clase trabajadora negra del sur rural. En los 70, el Blaxploitation, un movimiento cinematográfico que empoderó a los afroamericanos a través del cine, convirtió el denim en un símbolo de independencia, con íconos como Foxy Brown redefiniendo la moda negra.

Lamar lleva esa historia sobre sus hombros, pero también agrega una sutil provocación. Su elección del Canadian tuxedo en los Grammy no solo es un guiño a la historia del denim, sino también una referencia a su rivalidad con Drake, el rapero canadiense al que Not Like Us ataca.

Canadian Tuxedo: el ‘look’ de denim de Kendrick Lamar y su significado en la moda afroamericana

Kendrick Lamar posa con sus galardones en la alforma roja de la 67ª ceremonia anual de los premios Grammy este domingo, en el Crypto.com Arena de Los Ángeles, California (EE.UU.). EFE/ Allison Dinner

Más allá del beef, Lamar desafía la cultura del lujo en la industria musical. En un mundo donde los artistas suelen optar por brillos, pieles y logos de alto impacto, él elige mezclilla, una tela que históricamente ha sido la ropa de la clase obrera.

No necesita extravagancia para hacer una declaración; su imagen habla con la misma contundencia que su música.

Con este atuendo, Kendrick Lamar convirtió la moda en un acto de confrontación y afirmación. No solo vistió mezclilla; usó su imagen como una declaración. Porque en la música, en la moda y en la cultura, el mensaje siempre importa.