En el spa del hotel JW Marriot abrió una de las primeras tiendas exclusivamente de moda local en Panamá. Ocean Breeze Boutique abrió sus puertas para ofrecer marcas nativas del país como Diana Arcila, Edda González, Verónica Angel, Breebart, Palo Santo, Koral y Turquesa, Freedom Moses y Shorts to the beach.
La idea nace del interés en comprar diseño local que notó el equipo del spa entre quienes acudían a visitarlos. “Llegaban turistas preguntando dónde podían comprar prendas hechas localmente. Respondiendo a esa demanda, al spa se le ocurre darle uso a un salón que tenían disponible para crear una tienda”, comenta Debbie Kuzniecky, de la Cámara de la Moda y Diseño de Panamá, encargados de la curaduría de las marcas y diseñadores que son parte de la tienda.
Para ser parte de este nuevo showroom, las firmas deben ser originarias de Panamá, ofrecer moda representativa de nuestra cultura, con opciones tropicales apropiadas para el área de la piscina y detalles para regalos, algo que también buscaban los visitantes de estadías cortas. La idea es rotar después de un tiempo determinado las marcas y colecciones que estarán en este sitio.
En la boutique de Ocean Breeze hay ropa prêt-à-porter para mujeres y hombres, en tallas diversas y en su mayoría de código informal, pero con opciones un poco más vestidoras; además de accesorios y zapatos.
Según indica la Cámara de la moda y diseño, Panamá no contaba con una tienda con una oferta 100% de moda local. “Estas son firmas que nacen aquí, llevan procesos de slow fashion, con temáticas locales, originales y diferentes. Eso es importante porque siempre se ha considerado que lo local no es muy comercial o es muy caro, pero este nuevo espacio demuestra que sí hay opciones para todos los bolsillos, gustos y tallas”, comenta Debbie Kuzniecky.
Para que el movimiento comercial de las marcas panameñas crezca, Debbie opina que se debe trabajar en equipo. “Si hay más demanda de diseños hechos aquí o mayor interés de las tiendas en comprarle a los diseñadores locales, así ellos podrán crear e invertir más en sus marcas. Aunque es difícil, cada vez vemos más avance; ya hay diseñadores que viven de lo que hacen, algo que no pasaba antes. Importa fortalecer la industria y espacios como estos dan esas oportunidades”.
La boutique de Ocean Breeze, que es una experiencia física sin compras en línea, abre de 10 a.m. a 6:00 p.m.
