Boquete, Löyly, San Paolo Tredici y Stockholm son los nombres que la diseñadora Verónica Angel le dio a cuatro vestidos que lanzó en agosto. Cada traje, combinado con mascarilla, está inspirado “en un lugar en el que quisiéramos estar”, describe la creadora.
No poder ver en persona a sus clientas fue uno de los retos que tuvo que enfrentar en cuarentena. “Tuvimos que cambiar a una estrategia completamente digital que antes no teníamos”. Las citas ahora son virtuales y las diferentes prendas las tiene disponibles en un catálogo digital.
Por la pandemia los eventos se pospusieron para el próximo año, y las sederías y tiendas de textiles cerraron por lo que era difícil conseguir material. Toda esta situación hizo que se aprovechara lo que ya había en el taller. Se hicieron mascarillas con los retazos de colecciones pasadas. “Hemos tenido que hacer algunas otras cosas además de ropa, por ejemplo, almohadas para el hogar“.
Verónica Angel: ‘Tuvimos que cambiar a una estrategia completamente digital’
En estos meses, Verónica pudo expandir sus diseños y hacer envíos al extranjero. Ha mandado piezas a Estados Unidos, Grecia y Francia. Hasta Singapur llegó una mascarilla con un estampado de Diablo Rojo.
Durante este tiempo, también surgió un proyecto llamado Kit Crea, donde le entregaban a niños de bajo recursos una camisa, pinturas y pinceles para que ellos mismos pudieran desarrollar su propia prenda.
En octubre Verónica Angel celebrará su sexto aniversario y lanzará diseños con artículos de casa con estampados que ha hecho la marca en estos seis años.
Las mascarillas de la diseñadora están disponibles en www.cuanto.app/veronicaangelpanama.