En 1999, la probabilidad que tenía un hombre en Panamá de alcanzar el triunfo en un proceso electoral era de 14%. En 2009 la cifra aumentó a 19% y bajó solo un punto para las últimas elecciones de 2014. Pero en todos estos años la probabilidad de una mujer no supera el 2%.

Esto es parte de los resultados que arrojó una investigación sobre Desigualdad de género de las mujeres en el acceso a los cargos de elección popular, presentado en la Universidad Santa María la Antigua y efectuado por los investigadores Luis Carlos Herrera, Virginia Torres-Lista, Markelda Montenegro y María Teresa Mejía Berrío,

El estudio, financiado por la Senacyt y para el que se entrevistó a 8 de las 13 diputadas de la Asamblea Nacional, demostró la dificultad que tiene la mujer de alcanzar un cargo político, a pesar de que con los años ha aumentado su participación en los partidos.

También reveló que la brecha de desigualdad de género es aun mayor cuando una mujer aspira a un puesto con mayor poder político.

Según la presidenta del Foro de Mujeres de Partidos Políticos, Juana Herrera, las mujeres representan el 50% del padrón electoral, pero en las postulaciones “no llegamos ni al 20%”.

De acuerdo con estadísticas del Tribunal Electoral expuestas en el estudio, del total de personas inscritas en partidos políticos hasta 2017 las mujeres representaban el 49%. Los hombres el 51%.

El estudio se presentó ante un público mayoritariamente femenino, en el que figuraron varias precandidatas de diferentes partidos. Balbina Herrera, del PRD, estuvo presente. La vicealcaldesa de la ciudad de Panamá, Raisa Banfield, también llegó al final de la presentación.