Caía la lluvia en Las Tablas. Arsenio De la Cruz Nieto, nuestro entrevistado, nos esperaba resguardado en un techo en la Plaza Porras. Nos encontramos en este punto y nos dirigimos en carro a la casa donde haríamos la entrevista. En el camino, en una esquina, se leía “Punta Fogón”. Estábamos en Calle Abajo de Las Tablas.
La casa tenía una gran pancarta de una jovencita empollerada. Parte del garaje del frente estaba cubierto de retazos de lo que fue una carroza de una reina. Adentro, en una pared, colgaba un arnés con plumas verdes y azules que no pude evitar probarme. Lo había creado Danys Castro para su sobrina (la jovencita empollerada); él diseña y confecciona trajes de Carnaval y es el dueño de la casa donde estábamos.
Arsenio lo llama su maestro. Él fue quien le enseñó a coser y con quien empezó a decorar los trajes a la cantante panameña Sandra Sandoval. Arsenio vive a una hora de Las Tablas, en El Cacao de Tonosí. Fue precisamente el lugar de donde proviene lo que grabé en mi memoria cuando Sandra me contestó en febrero, desde Viña del Mar, quién le había hecho algunos de los trajes que se llevó a Chile: “Arsenio, de El Cacao de Tonosí”, me respondió a través de una videollamada de Whatsapp.
Arsenio de Tonosí: el decorador de los trajes de Sandra Sandoval
El fanático diseñador
Tres vestidos le había enviado la cantante a Arsenio para que se los decorara especialmente para su participación en el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, celebrado a principios de este año.
Uno era un vestido corto verde; otro, un enterizo naranja; y el tercero era azul. “Prepárame los que tú veas más convenientes”, recuerda que le dijo Sandra. El diseñador prefirió trabajar con los dos primeros y esos fueron los que ella se llevó a Chile. El azul se trabajó después para otra presentación.
El vestido verde y el enterizo naranja fueron los escogidos por la producción del festival para que la cantante panameña bailara y apareciera junto a su hermano Samy Sandoval ante al que llaman “el monstruo de la Quinta Vergara”, el público del reconocido festival. Samy y Sandra se presentaron en dos ocasiones con el tema Cómo gozo, en la competencia a mejor canción folclórica.
No ganaron, pero en el escenario de Viña del Mar brillaron los trajes decorados por un muchacho que vive en una pequeña comunidad de poco más de mil habitantes, y ubicada a 345 km en carretera de la capital de Panamá.
Arsenio de Tonosí: el decorador de los trajes de Sandra Sandoval
Arsenio siempre ha sido fanático de Los Patrones de la Cumbia. Como parte de un fanclub, iba a los bailes y hasta se hacían un suéter para cada presentación. En 1999, cuando era un adolescente, los conoció en persona. Danys Castro, su amigo, fue quien se los presentó y fue con él que aprendió a coser años más tarde. Juntos confeccionaron el disfraz del Domingo de Carnaval de Diana Patricia Broce, reina de Calle Abajo de Las Tablas 2006.
En aquella época, Danys también hacía los trajes de Sandra. En 2008, por los compromisos que tenía Danys en reinados y carnavales, le sugirió a Arsenio si se podía encargar de trabajar los atuendos de la cantante. Arsenio aceptó. Desde entonces es él quien decora los ajustados atuendos que ella luce en muchos de sus bailes.
Lentejuela por lentejuela
Sentado en la sala de la casa de Danys, apoyándose en un cojín grande cuadrado, que formaba parte del espaldar de un sofá, Arsenio nos mostró cómo decoraba un vestido verde corto manga larga que le había hecho llegar Sandra. Las piezas son confeccionadas por Leotards y él se encarga de decorarlas.
En el borde inferior de la falda, formando una línea hacia arriba, cosía una lentejuela naranja con otra más pequeña plateada y la unía con una chaquira verde, usando hilo de madeja, el mismo que se usa para el marcado en las polleras. Una semana antes había comenzado a trabajar en este atuendo y ya tenía formadas varías líneas que cubrían esta parte del vestido. También había colocado lentejuelas y canutillos en el busto y en el borde de las mangas. Usa hilo de madeja porque, me cuenta, es el más fuerte. La tela de los trajes se estira y con los bailes que hace Sandra puede haber un accidente.
Arsenio de Tonosí: el decorador de los trajes de Sandra Sandoval
Arsenio de Tonosí: el decorador de los trajes de Sandra Sandoval
Los movimientos de la artista, así como su silueta, los toma en cuenta para la decoración. “Tengo que colocar las cosas en el punto adecuado para que ella lo pueda lucir”. Antes de coser, Arsenio hace un bosquejo a lápiz de cómo intervendrá el vestido. “Empiezo a ver qué le voy hacer para que los diseños no sean los mismos. La ropa cambia, pero el diseño tiene que variar”. Todo el trabajo lo hace él solo, a mano.
Le puede tomar una semana armar una pieza dedicándole de 1:00 a 5:00 de la tarde, de lunes a viernes. En las mañanas él labora como personal administrativo en la Escuela El Cacao. Arsenio se gradúo en Educación Primaria.
En comunicación con la ‘patrona’
A veces la artista le dice cómo quiere el diseño y muchas otras lo deja al gusto de él. Constantemente se comunican por teléfono. Ella le avisa cuando le envía algún traje o le pregunta para cuándo él puede tener uno listo.
Los atuendos se los envían por encomienda hasta El Cacao de Tonosí desde la ciudad de Panamá o desde Monagrillo, el pueblo natal de los hermanos Sandoval, vía Macaracas.
Arsenio calcula que le ha decorado más de 300 vestidos a Sandra; unos 30 o 40 por año. La artista puede estrenar de dos a tres vestidos al mes, intervenidos por él.Trabaja todo el año para ella. En algunas excepciones, cuando tiene tiempo o la “patrona” está de vacaciones, hace marcados en camisa y en vestidos.
Arsenio de Tonosí: el decorador de los trajes de Sandra Sandoval
Arsenio de Tonosí: el decorador de los trajes de Sandra Sandoval