Sus cuerpecitos no alcanzan los mil gramos de peso. Llegaron al mundo varios meses antes de su fecha probable de nacimiento. Sus cerebros, así como sus pulmones y su sistema digestivo, están inmaduros, por lo que requieren del mejor alimento posible para su pequeño organismo: la leche materna.

Son estos niños, pacientes de la unidad de cuidados intensivos neonatal del Complejo Hospitalario Doctor Arnulfo Arias Madrid de la Caja de Seguro Social, los que reciben el preciado alimento que se resguarda en el banco de leche de este complejo.

La pediatra neonatóloga Esther Toala es la jefa del servicio de neonatología y coordinadora de este banco, que funciona desde 2013. Explica que un banco de leche es un centro especializado donde la leche humana, que es donada por madres seleccionadas, se recibe, almacena y procesa. La leche se pasteuriza y se distribuye a los bebés.

Un banco de leche materna que salva pequeñas vidas

Un banco de leche materna que salva pequeñas vidas

El principal objetivo del banco es promocionar la lactancia natural. “Si no tenemos una buena lactancia en el país, no tenemos leche que pueda ser utilizada para donar”, recalca la doctora.

En aquellos niños que nacen entre las 25 y 26 semanas, la glándula mamaria de sus madres no suele producir leche inmediatamente pues su embarazo no llegó a término completo (40 semanas). Por ello se recurre a un banco de leche humana para su alimentación.

Toala explica que la leche materna tiene enzimas digestivas que ayudan a que el trabajo que hace el recién nacido prematuro para digerirla sea menor y además evita las complicaciones. Entre los tantos beneficios que tiene este alimento, está que disminuye las infecciones, los bebés tienen un mejor neurodesarrollo y hasta acorta el tiempo de estancia hospitalaria.

La doctora aclara que estos niños no pueden digerir fórmula; no la toleran. Pueden tener complicaciones y en algunos casos sufrir una enterocolitis, una patología propia de los prematuros y pueden morir.

Un banco de leche materna que salva pequeñas vidas

Un banco de leche materna que salva pequeñas vidas

 

Mamá donante

Al banco se comunican aquellas mujeres que desean donar. Las que lo hacen son mamás comprometidas con la lactancia materna, que le han dado pecho a su bebé desde que nació y cuyo congelador lo tiene repleto de envases con su leche; no le cabe uno más. Es una mamá con excedente de leche materna.

Un equipo del banco programa una visita hasta su casa, se le hace una entrevista y se cerciora que tiene excedente. Se le hace un examen serológico (como el que se hace para un banco de sangre) y se le toma muestra de su leche. De acuerdo al resultado de la muestra, se programará la recolección del alimento.

Si desea ser donante de leche materna puede comunicarse al banco al teléfono 503-6865.

A la donante se le facilitan los envases estériles para que ella se ordeñe en casa y hasta se le proporcionan algunas recomendaciones nutricionales para aumentar el valor energético de su producción. La mamá no tiene necesidad de salir de su casa, ni de ir al banco. La donante conserva el alimento en su congelador y un equipo del banco acude hasta su casa y la recoge congelada.

En el banco, la leche es pasteurizada y se somete a pruebas bioquímicas para determinar su calidad. “Se cuida mucho la bioseguridad de la leche. Debe ser muy segura porque se trata de niños muy pequeños”, detalla la doctora Toala. Una vez que pasa la prueba se le puede suministrar a los bebés.

 

Preciado alimento

La reserva de este banco se usa solo para niños prematuros de la unidad de cuidados intensivos neonatal del complejo hospitalario, ya que no se cuenta con grandes volúmenes de leche. “Quisiéramos tener muchas donantes, muchos volúmenes y poder satisfacer la demanda de todos los recién nacidos hospitalizados en el complejo”, expresa Toala. En la unidad se recibe a bebés prematuros nacidos en otros centros de salud, incluso aquellos que son privados.

En 2017 se registraron 41 mujeres donantes. La mamá donante mantiene su producción para su bebé y dona el excedente. Mientras más se ordeña, más leche produce.

La doctora resalta que la cultura del amamantamiento es el secreto que guardan todos los países del primer mundo. En países de la Unión Europea, por ejemplo, se defiende mucho la lactancia materna y están conscientes de sus virtudes.

Un banco de leche materna que salva pequeñas vidas

Un banco de leche materna que salva pequeñas vidas