Fianeth ha sido dama de la tuna de Calle Arriba de Las Tablas en diversas ocasiones. Es reina de belleza desde los 15 años. En 2013, como representante de Panamá, ganó en El Salvador la corona de Petite Mesoamérica Internacional, para concursantes de una estatura máxima de 1.65 metros (ella mide 1.54 metro). Fue Señorita 10 de noviembre, en 2015, para los santeños residentes en San Miguelito. Esta noche, a sus 23 años, será coronada reina 67 de Calle Arriba.

¿Cómo fue crecer en la tuna de Calle Arriba de Las Tablas?

Mi tía Isabel Loaiza Corro fue reina en 1988, y empecé como dama de la tuna a los 12 años al participar en la corte real 2010 de Mileydis Vargas González. No fui dama antes porque las niñas chiquitas se cansan rápido y mi mamá quería que lo disfrutara más. Cuando no fui dama, cooperé vendiendo boletos, apoyé a mis antecesoras; cultivé ese camino a la corona, que fue mi deseo desde la noche en que vi la coronación de Mileydis, hace más de 10 años.

¿Quién te inculcó la pasión por el Carnaval?

Mis abuelos paternos son tableños, me enseñaron a amar el folclor. A mi mamá, capitalina, le encanta el Carnaval. Ella me inculcó la picardía y el amor por el mismo.

¿Qué te aportó haber sido reina de belleza?

Lejos de lo que la gente piensa, los concursos ayudan a la formación de una chica, le dan seguridad, dominio y disciplina. Una reina de carnaval debe tener — más que belleza física, carisma o una personalidad arrolladora— cercanía con la gente.

Conoce a Fianeth Corro Madrid, reina de Calle Arriba de Las Tablas 2020

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¿Qué novedad trae tu reinado?

Campañas en redes sociales con temas como la concienciación sobre los derechos de las personas LGTBI+; para ello entrevisté a miembros y aliados de esa comunidad, en distintos sectores. Uso mi profesión como comunicadora para hacer docencia y promover el respeto.

Hace un año regresaron las dos tunas. ¿Esto qué ha representado?

El carnaval tableño necesitaba volver a su tradición de dos reinas, como estamos acostumbrados. Además de seguir brindando un espectáculo de lujo y donaire en el Parque Porras, se quiere volver a las costumbres de antaño. También es una fiesta cada vez más costosa; quienes aspiren a la corona deben saberlo. Lo más importante es mantener viva la tradición.

Cuéntanos algo que la gente no sepa de ti.

Cuando tenía tres años tuve un accidente de auto con mis papás. Mi mamá perdió dos dedos y medio de su mano. Tuve una fractura severa en el brazo y una raspada considerable que, por negligencia médica, me causó un desgaste en la piel. Le dijeron a mis padres que si no mejoraba, habría que amputar mi brazo. Ahora tengo una cicatriz. Esto no me ha limitado. Desde chiquita aprendí que la vida es un regalo. Al ver mi cicatriz, veo mi brazo, ese que pude haber perdido.

Una cualidad de Grace, la reina de la tuna contraria.

Todos saben que nos llevamos muy bien. Ella tiene una belleza muy dulce y angelical, y un gran corazón. Hemos tenido una buena relación desde antes del reinado.

¿Planeas participar en otros concursos de belleza?

¡No! (responde entre risas) Este es el cierre de una etapa muy linda. Me despido de los reinados y quiero dedicarme a mi carrera profesional.

Tu tonada favorita.

¡La que se refiere a mí! Hay otra muy popular que se llama La Motosierra, pero mi favorita dice: “Presume sus seis coronas, nuestra reina majestuosa, que viva Fianeth Primera, soberana primorosa”.