Fue el 18 de enero de 1961 el primer encuentro que se hizo para crear el Teatro en Círculo. La edificación como tal, ubicada en la urbanización Herbruger (El Carmen), llegó más de una década después, en 1979.

Los 63 años de historia, con recortes de publicidad y reportajes de prensa, se pueden apreciar en unos enormes tomos que se resguardan en una pequeña biblioteca, creada por Isabel de Nachio, fundadora del teatro. Ese espacio también guarda, en unos tomos más pequeños, cada programa de obras que se han presentado en ese escenario.

Una mañana de marzo Isabel nos mostró este tesoro, mientras evocaba cómo un día Wendy Arnold, quien era directora teatral, se le acercó a ella - que no tenía relación con este campo- para crear un teatro y hacer producciones a beneficio social.

Isabel tiene 92 años y es una de las socias fundadoras de la Asociación del Teatro en Círculo, junto a Rosemarie de de la Guardia, Judith de Maduro, Betty de Endara, Lupe de Alfaro y Wendy Arnold, quienes ya han fallecido. El nombre de Isabel y de Wendy aparecen en una placa en la entrada del teatro donde dice “fundado en 1961 por”. Las instalaciones fueron construidas cuando Manonguita de Obaldia era la presidenta de la asociación. Isabel recalca: “nosotros somos los cuidadores, pero el teatro es de la comunidad”.


¿Dónde se presentaban las obras al principio?

Hicimos como 30 obras antes de construir el edificio. La primera obra se presentó en el hotel El Panamá; la segunda, en la Universidad de Panamá, luego en la Cámara de Comercio. Íbamos como gitanos. El edificio se inauguró en 1979.


¿Cuál fue esa primera obra que hicieron?

Romanoff & Juliet, en inglés porque no conseguimos actores en español.


¿Recuerda el primer teatro que visitó en su vida?

Nací en Chicago, Illinois (Estados Unidos) y me habían dado una beca para tomar clases de pintura en el museo de arte de Chicago. Al lado había un pequeño teatro y todos los fines de semana habían obras de fairy tales (cuentos de hadas). Mi papá y mi mamá me llevaban todos los fines de semana, sábado y domingo, y era una cosa que me atrapaba. Tenía 12 años.


¿Cuáles son sus obras favoritas?

Me gustan todos los musicales. Una buena obra de comedia, de drama, también, pero tengo preferencia por los musicales.


Además de la fundación, ¿cómo se involucró en el teatro?

Fui aprendiendo. Wendy dirigía toda la parte estética y yo era la productora; buscaba el dinero, buscaba los artistas, los directores. Quedé como en cinco obras como productora. Usábamos nuestra propia ropa porque no podíamos comprar el vestuario, teníamos que emplear un carpintero para hacer las paredes, pero nosotras pintábamos. Yo cosía las cortinas. La gente sacaba de su casa todos los muebles [para la escenografía]; nosotros mismos hacíamos todo. Hoy es diferente, ya empleamos: directores, artistas, costureros, técnicos de sonido.


¿Hay alguna anécdota memorable que usted recuerde?

Un día, antes del estreno, llegó un director y no le gustaban los muebles [de la escenografía]. La productora y todas las que estábamos nos preguntamos, “¿ahora qué hacemos?” El director nos decía que buscáramos otros muebles, que los quería de tal forma.

Estaba Rosemarie de de la Guardia, ella dejaba sus camiones aquí en el teatro por un tiempo, ese día no estaba el chofer. Ella subió los muebles al camión y empezó a manejarlo. Ella nunca había manejado un camión. Yo fui con ella. Llevamos los muebles a la tienda que nos los había prestado y comenzamos a llamar a las socias a ver si tenían en casa un sofá que pudiéramos usar. El director quedó contento para estrenar al día siguiente. Eran los años 80.


¿En algún momento de su historia el teatro tuvo que cerrar sus puertas?

Solamente para la pandemia. Dos años cerrado. Los teatros estaban de último en la lista para su reapertura. Todos los fondos que teníamos ahorrados se fueron para su mantenimiento. ¿Qué hicieron las maravillosas mujeres voluntarias? Hicieron un bingo digital, un bazar, vendieron cuadros. Hicimos un libro de recetas de cocina que no tenía nada que ver con el teatro, pero teníamos que recaudar fondos para pagar su mantenimiento.