La nueva profesora de matemáticas para estudiantes de décimo grado en Panamá dejó a un lado su tiempo libre por vacaciones universitarias para enseñar ecuaciones. Es estudiante universitaria, emprendedora, parte de un proyecto de salud mental para niños y se siente inconforme con el actual sistema educativo. Pero ella quiere hacer algo al respecto.
Diana Landero, de 22 años, es la profesora de las clases de matemáticas de décimo grado que actualmente imparte, de modo virtual, la Fundación Ayudinga. Es uno de los siete jóvenes profesores voluntarios que convocó la organización para dar clases en línea a miles de estudiantes, que debido a la suspensión de clases como medida de prevención ante el coronavirus, se encuentran en casa.
Fundación Ayudinga es una organización panameña sin fines de lucro que utiliza una plataforma multimedios para enseñar ciencias a través de métodos innovadores y divertidos. Su contenidos se divulga en redes sociales y cursos en línea.
La panameña de 22 años que da clases de matemáticas en Ayudinga durante la cuarentena
El 11 de marzo, dos días después de confirmarse el primer caso de coronavirus en el país, se suspendieron las clases en los centros educativos. Ese día, Ayudinga anunció que impartiría lecciones en vivo, a través de sus plataformas digitales, de matemáticas, física y química.
En su primera semana, dieron alrededor de 50 clases virtuales. Porque las clases se detuvieron, pero la educación no tiene por qué hacerlo.
Lunes, miércoles y viernes, Diana sale de su casa, en San Miguelito, para llegar hasta la sede de Ayudinga en Ciudad del Saber, para dar su clase de matemáticas. Su papá suele llevarla. Así es su compromiso con la educación.
Medicina no, mejor la enseñanza
Diana estuvo estudiando medicina en la Universidad de Panamá “pero no era lo mío”, asegura. “Me la pasaba discutiendo con los demás sobre la educación en Panamá que, a mi parecer, le falta mucho”.
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Decidió buscar una carrera alineada a la enseñanza. Así se encontró en la Facultad de Ciencias de la Educación de ese mismo centro universitario la licenciatura en psicopedagogía, que aborda el enfoque de la psicología aplicada a la educación. “Y me ha gustado muchísimo esa carrera”.
Había participado en proyectos previos organizados por fundación Ayudinga. Así conoció a Joel Batista, su fundador. Poco después del anuncio del gobierno de suspender las clases como medida de prevención ante el coronavirus, la contactaron de para ser una del las profesoras voluntarias.
Una clase de 3 mil estudiantes
Aparte de sus estudios, Diana se dedica a dar tutorías privadas a estudiantes de primaria. Ante la situación, esas lecciones ahora las da por videollamada.
La panameña de 22 años que da clases de matemáticas en Ayudinga durante la cuarentena
En la primera clase de matemáticas para décimo grado que dio se conectaron alrededor de 3 mil estudiantes. Cuenta que se sintió un poco extraña. “Es que nunca había dado clases en esa modalidad y menos a un grupo tan grande”.
La trasmisión en vivo tiene una sección de chats donde los estudiantes pueden enviar sus preguntas sobre la clase. También le envían sugerencias, como cuando en la primera clase le pidieron explicar más despacio, que usara todo el tablero y aprovechara el espacio para trabajar y que no borrara los problemas tan rápido. “Ya después lo tenía en mente y me medía más”. También las bromas son comunes. ‘Profe, ¿puedo ir al baño’. “Son pelaos, uno no puede esperar que este siempre serios”, comenta.
La panameña de 22 años que da clases de matemáticas en Ayudinga durante la cuarentena
Precisamente, no tener presente a las personas a quienes dicta el curso ha sido un reto. Así no es tan sencillo nivelar a los chicos según sus conocimientos. “No puedo ir muy rápido para quienes no están muy avanzados puedan entender; tampoco tan lento, para quienes ya saben un poco más”.
Piensa que su juventud y su aspecto (ella tiene el cabello rosa) influye en sus alumnos virtuales. “Es diferente para ellos ver a una persona joven intentando explicarles una materia, creo que sí prestan un poco más atención.
Más educación enfocada en inteligencia emocional (desde niños)
A Diana le causa conflicto algunas características del sistema educativo panameño. “Ver la desigualdad entre escuelas privadas y públicas es lo que más me molesta. Vengo de una escuela privada y tuve la oportunidad de una buena educación. Cuando veo que otros compañeros, que vienen del sistema público, no recibieron la misma calidad de educación que yo, me pregunto por qué el Estado no se puede asegurar que recibamos lo mismo”.
Piensa que los docentes deben mantenerse en constante actualización. “Lo he visto hasta en la universidad, muchos profesores no entran por vocación ni porque les guste enseñar. Entonces, por ejemplo, ¿cómo una maestra de primaria va a dar clases si en primer lugar no le gustan los niños? Se amarga ella y luego a los estudiantes”.
“Se que muchos se están capacitando, pero aún veo en la universidad que varios aun no saben conectarse a un proyector o no saben usar una computadora. Eso ya es necesario. Los chicos van a más avanzados que uno”.
La panameña de 22 años que da clases de matemáticas en Ayudinga durante la cuarentena
Ella agregaría al plan de estudio escolar asignaturas enfocadas en la salud mental para niños e inteligencia emocional.
“En estos últimos dos años, el tema de la inteligencia emocional fue un boom en las empresas y estaban capacitando a su personal en eso. Pero ¿por qué esperar a ser adulto cuando ese es un tema que puedes tratar desde pequeño?”.
Diana forma parte Actíva7e, un proyecto de salud emocional que lleva a cabo un grupo de jóvenes donde se le da talleres sobre auto estima, pensamiento crítico y habilidades sociales a niños del sexto grado de primaria.
Aprender sobre el correcto manejo de las finanzas propias le parece esencial. “Cómo manejar el dinero que se empieza a ganar cuando uno trabaja o cómo administrar la mesada que te dan tus papás”.
Además, emprendedora
Diana es la creadora de la marca El nudo de la serpiente, donde presenta diseños de trajes de baño, bolsos de croché confeccionados a mano por ella.
La panameña de 22 años que da clases de matemáticas en Ayudinga durante la cuarentena
Aprendió a tejer a los 11 años con una vecina de sus abuelos en Chiriquí “siempre quise hacer mi propia ropa”. Fue practicando por varios años y en 2018 creó la página de Instagram @elnudelas para vender sus diseños.
Puede consultar el horario de clases de Ayudinga en su cuenta de Instagram @ayudinga.