Las bodas coreanas tienen tradiciones únicas y curiosas. Estas son algunas de ellas:
Los novios se pueden ver antes de llegar al altar:
Incluso, se ayudan mutuamente a escoger sus atuendos. La panameña cuenta que en Corea tienen una mecánica muy interesante para las bodas y es que se suelen hacer en edificios de hoteles en el que cada piso cumple una función diferente: en el primer piso, por ejemplo, se encuentra el lugar donde la novia se arregla. En el próximo es donde escoge su vestido y el de su esposo porque sí, ambos eligen la ropa juntos. “No existe esa tradición en la que los novios se ven por primera vez en el altar. En Corea, él [su esposo] me ayudó a escoger mi vestido. En todo momento están juntos ayudándose a escoger las cosas”, cuenta Yorgelys.
Yorgelys y JongMin en el día de su boda en Seúl, Corea. Foto cortesía.
La novia recibe arreglos florales de parte de sus invitados
Ella se sorprendió cuando notó que incluso el alcalde municipal le envió un arreglo. Es algo que había visto en las telenovelas coreanas, bodas con recepciones repletas de flores. “En el día de la boda vi el salón repleto de arreglos de flores y me quedé sorprendida cuando mi esposo me dijo que me las habían mandado a mí. Mis suegros son tan lindos que hasta el alcalde municipal del lugar donde vive mi esposo mandó un arreglo. A mi suegra todos las conocen y la quieren”
Sesiones de fotos con cada invitado
El día de la boda empezó con una sesión de fotos, algo muy tradicional. Es una sala ubican a la novia y pasan todos los invitados a tomarse foto con ella.
Saludo de respeto a los padres es parte de la ceremonia.
Una ceremonia de 20 minutos
Cuando inicia la ceremonia principal, las puertas del salón en el que se celebra suelen estar cerradas y se abren para que la novia pueda hacer su entrada. Como la familia de Yorgelys estaba en Panamá viendo la ceremonia a través de un live en redes sociales, la panameña entró de la mano de su esposo. Ellos ya llevaban un año de casados y esa primera boda fue en Panamá. En la boda se hacen saludos de respeto a los padres de los novios, entre otros actos. Todo dura alrededor de 20 minutos.
La panameña comparte que en Corea las bodas son simbólicas. En ese país, los novios llegan a sus bodas ya con sus matrimonios registrados. Es decir, desde que se pide la mano ellos acuden a registrar su matrimonio. “Eso se hace porque se suele decir que si los novios se separan durante el proceso de compromiso, al menos se reconocen algo monetariamente”, relata Yorgelys. Como ella y su esposo tenían un año de casados, también tenían su matrimonio registrado en Corea y la boda sólo era para compartir con las personas.
Yorgelys y JongMin en el día de su boda en Seúl, Corea. Un año antes, se casaron en Panamá. Foto cortesía.
Ropa tradicional coreana
En la ceremonia Yorgelys utilizó un vestido de novia blanco y su esposo, un smokin. Luego se cambiaron a un hambok, como se le llama al vestido tradicional coreano que consiste en una blusa o chaqueta corta de mangas amplias, como alas; y una falda amplia llamada chima. El hambok se utiliza para bodas, para el año nuevo, nacimientos de los hijos o para ceremonias importantes.
Pagar para entrar a la boda
Algo muy tradicional en las bodas coreanas es que lo invitados deben pagar, el monto que deseen pero considerable, para entrar. Esta tradición fue de las que más le llamó la atención a Yorgelys. “En Panamá, los regalos no se ven como algo obligatorio. En Corea, la obligación es ir a las bodas y pagar. También es tradicional tener un libro, poner el nombre del invitado y cuánto dinero te dio. Eso se hace para cuando llegue la boda de esa persona o de sus hijos, tú sepas cuánto te dio en tu boda y tú des lo mismo o más”, describe Yorgleys.
Ella cuenta que cuando pagan en la entrada, los invitados reciben un cupón de comida. Cuando se termina la boda. Suben al salón de buffet con su cupón y con ello pueden entrar a comer. “En ese momento los novios pasamos mesa por mesa para agradecer a cada invitado y luego de tomarse fotos y videos con todos, los novios se pueden sentar a comer”
Al finalizar la boda, el lugar donde fue la ceremonia habilita un salón para que los novios suban y cuenten, con ayuda de máquinas, el dinero que recibieron. “Ahí mismo se tiene que hacer el conteo porque el hotel cobra un impuesto por sacar ese dinero de sus instalaciones”.
“Después de la oficina, a la boda”
En esas bodas no hay baile, ni fiesta, la gente come y todos se van. También, los invitados no suelen lucir atuendos muy elegantes para acudir a menos que sean familiares cercanos. “No es la típica boda donde te pones a planificar tu outfit, tu peinado. Si no eres familia, el invitado puede asistir hasta con ropa para ir al mall o a la oficina ¡Son muy descomplicados en ese aspecto!”
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