A Winnie Suku aún le cuesta procesar los tipos de abrazos que ahora, cuando viene de visita a Panamá, recibe de personas que se acercan a saludarlo. Esos momentos de admiración mutua, ya sea en un supermercado, en un concierto de Señor Loop o en Darién, expresan tanto que a él las palabras se le quedan cortas.
Eran las 5:30 p.m. de un viernes en Finlandia cuando hicimos esta entrevista. El sol tenía cinco días sin salir, algo típico en el norte de Europa. Acá, en Panamá, era una mañana húmeda de lluvia con sol.
El 8 de febrero de 2023, Winnie Suku subió su primer TikTok hablando de su vida como panameño en Finlandia. En ese clip de 1:18 minutos, mostraba cómo se preparaba para un trayecto de 20 horas que estaba por realizar para viajar de Helsinki a su país natal.
Yo fui una de las 15 mil personas que en ese entonces vio ese video. La voz de un panameño, con su imperdible acento capitalino, hablando en medio de la nieve sobre su emocionante viaje de visita a casa, mientras mostraba su cotidianidad en un día de lavandería en la fría Finlandia, captó mi atención.
Un año y medio después de ese TikTok, yo no era de las únicas cautivadas por los cuentos de ese panameño: cientos de miles seguidores en redes, millones de likes en TikTok y una masa de personas de Panamá, Latinoamérica y Europa ven su contenido.
En un tono cálido, como el de ese ‘pasiero’ que en cada parking o fiesta familiar termina echando los cuentos, Winnie muestra sus experiencias como latino en Finlandia, su vida como baterista de bandas de metal, su trabajo en el aeropuerto o como cajero en un supermercado, y el rol que más le llena el corazón: el de criar a Río, su bebé de un año.
Winnie Suku, músico, papá y creador de contenido en redes sociales. Foto. Cortesía
Aunque ahora lo reconocen desde Darién hasta París (unos venezolanos lo reconocieron en esa ciudad), se le hizo difícil tomar la decisión de mostrarse en internet. “El miedo a las cero vistas me mataba. Mucha gente me decía que yo no tenía una vida muy común, y yo quería enseñarle a la gente que sí se puede cuando quieres algo”
Le inspira representar la esencia del panameño donde vaya. “Desde los 14 años ya yo estaba hablando de viajar y sobre todo, de representar a mi país de buena manera. No en el sentido de ser un ente, sino de llegar a otros lugares del mundo, portarme bien y encajar a donde voy para que digan: ‘Conocí a un panameño y el tipo era muy buena gente, respetuoso’”, comenta Winnie en entrevista a ELLAS.
Enciclopedias y ‘punk rock’
Winnie nació en Santiago de Veraguas, la tierra de su madre, pero toda su vida vivió en la capital, en sitios como Río Abajo y Brisas del Golf. Su papá, de Puerto Armuelles, Chiriquí, es propietario de un negocio de aires acondicionados.
El plan era que Winnie, el hijo mayor, se encargara del negocio luego del retiro de su papá, “pero yo quería otras cosas”, recalca.
De niño disfrutaba ver las enciclopedias que encontraba en casa y leer sobre los países que ahí aparecían. También sumergirse en las letras de los videos musicales de metal o punk rock que aparecían en MTV que desde entonces hablaban sobre política, derecho de los animales e incluso cambio climático.
Winnie es baterista. Desde que vive en Finlandia, ha tocado con dos bandas de ‘rock’ y tuvo varios ‘tours’ por Europa. Foto. Cortesía.
Trabajó en el negocio de su papá y ahorraba para sus viajes. Winnie toca además la batería. En Panamá notó que dedicarse a la música no era una idea que se tomaba en serio. “Sentía que estaba rodeado de muchas personas que no hablaban mi idioma […] Me he dado cuenta que siempre he querido hacer eso: salir, tocar y que la gente me pregunte ‘¿De dónde eres?’ y yo pueda responder ‘De Panamá’. La gente conoce cosas grandes de Panamá, pero no la calidad humana que somos y lo que nos define como patria”
Adaptación
Winnie vive en Finlandia desde hace 11 años. Allá llegó por compromisos familiares de su chica, a quien conoció en El Valle de Antón mientras ella hacía voluntariado.
Cuando se mudó a ese país nórdico se sintió como un pez en el océano. La gente sí hablaba su mismo idioma; lo de viajar, ser tú mismo, hacer tours de metal no era algo de locos. “Mi papá, graciosamente, siempre ha sido muy finlandés. No es de tantos abrazos, pero siempre te apoya. Lo difícil fueron las fiestas de Navidad, sobre todo para mi mami”
Junto a sus papás y hermano menor en Finlandia. Foto. Cortesía
Río
Desde que vive en Finlandia, ha tocado con dos bandas de rock con quienes ha realizado varios tours por Europa. Con una de ellas interpretó en alrededor de 120 conciertos en un año. Pero cuando le dijeron que, por presupuesto, escogerían a otro baterista para las fechas en Australia, que es el lugar que aún le falta conocer, se desilusionó. Sin embargo, pronto supo que todo pasa por algo. “Si me hubiese ido de tour, mi bebé no estaría aquí”
Su bebé, Río, ya tiene un año. Ha viajado con él a Panamá y sueña con traerlo al menos una vez al año.
Quedarse en casa con su bebé será su trabajo hasta agosto de 2025. “Siempre pensé que la gente exageraba cuando hablaba del amor que uno le tiene a un bebé. Es difícil de describir. Aprendí de mi madre a ser muy amoroso. Veo que mucha gente me observa porque yo lo abrazo, lo beso, le digo que lo amo”
‘Siempre pensé que la gente exageraba cuando hablaba del amor que uno le tiene a un bebé. Es difícil de describir’, expresa Winnie sobre su hijo Río a quien cuida en casa. Foto. Cortesía.
Está bien no llegar de primero
Winnie viene documentando su vida desde hace años, pero publicarla en internet, era otra cosa. “Me empecé a preguntar qué pasaría si dejaba el miedo al rechazo, a ser la burla, ‘¿una persona de 34 años, gordito, haciendo TikTok?’ Eso fue lo que más valentía me dio. Me dije que cómo si yo mismo no me impulsaba a salir del hoyo negro ¿Cómo podía transmitir que sí se podía?”
Un día camino a la lavandería, abrió la cámara del celular y empezó a hablarle. Comenzó a desarrollar contenidos basados en cómo vive un panameño en Finlandia “Lo empecé a hacer para darle entender a la gente que todo se basa en inteligencia económica y de cómo manejas tu dinero. Para demostrar que no siempre hay que llegar de primero, que está bien llegar de segundo o cuarto”
El panameño tiene más de 10 años de vivir en Finlandia. Foto. Cortesía.
El panameño ve a su contenido digital como su primera empresa. Invierte en la creación de sus contenidos, que él mismo edita de manera sencilla en la app CapCut. “Esto empezó como un reto para demostrarme a mí mismo que sí podía empezar proyectos y terminarlos. Que en 40 años pueda ver mis videos, reírme y decir qué divertido fue hacer todo esto. Es mi propio diario”
Foto. Cortesía
