Arte, cultura y sabor panameño es lo que promete la edición XLIII de la Feria Nacional de Artesanías. Esta vez organizado por el Ministerio de Cultura (MiCultura) y siendo catalogado por los mismos como “el proyecto macroeconómico más importante del país en el tema artesanal”.
Serán 435 artesanos los que estarán presentando sus trabajos en el centro de convenciones de Atlapa, del miércoles 26 al domingo 30 de julio. Una oferta que comprenderá desde trabajos en madera tallada, alfarería y cerámica, textiles, cuero o joyería y bisutería, por solo mencionar algunos ejemplos.
”Serán jornadas donde el artesano local ofrecerá productos de forma directa al consumidor, sin alterar los precios. Vendrán artesanos de todas partes del país, incluyendo las comarcas”, explica Esther Pérez de Herrera, directora de artesanías de MiCultura, agregando que además los asistentes se encontrarán con artesanías de consumo como las rosquitas, cocaditas, pan y gastronomía más sustancial como arroz, tamales, yuca, pernil, comida afroantillana, entre otras variedades de platillos.
Los visitantes podrán adquirir todo tipo de artesanías. Cortesía.
Sumado a esto, las actividades que ofrecerá la feria son varias, en su horario de, día miércoles de 3:00 p.m. a 10:00 p.m. y los demás días de 10:00 a.m. a 10:00 p.m. Ya que el público podrá participar de talleres, conferencias, capacitaciones, además de los concursos como el de la pollera, camisilla, el artesano destacado y el del artesano juvenil, este último enfocado en promover el interés y la participación de los jóvenes en aprender el oficio de las artesanías.
”Para los chicos tendremos un pabellón educativo que contará de 11 diferentes puestos con dinámicas y juegos para que vean de primera mano cómo se hacen las artesanías, como por ejemplo la confección de las alfombras de Corpus Christi”, comenta Pérez de Herrera.
Las entradas a la feria tienen un costo de B/.3.00 balboas la entrada general, mientras que los jubilados pagan B/.1.50, y los estudiantes B/.1.00. En caso de los menores de 12 años, entran gratis.
Y para sumarle más amenidades, diferentes artistas se presentarán en la tarima. Desde grupos folclóricos, hasta el ballet nacional, la red de orquesta, hasta músicos como Osvaldo Ayala, Los Rabanes y Samy y Sandra Sandoval, entre otros nombres.
Para el 2019, última fecha que se pudo realizar la feria de forma presencial debido a la pandemia por covid-19, la feria recibió alrededor de 30 mil asistentes y ventas en más de 950 mil dólares, cifras que esperan superar este año.
Pero, más allá de los números, la feria representa un “punto de exposición y contacto para los artesanos”. “Los artesanos deben tomar la feria como un escalón a la promoción de sus productos”, comenta Alexander Alarcón, artesano enfocado en máscaras y diablos, que ya lleva algunos años participando de esta actividad. Para él, la cultura, el folclor nacional es lo que le da la identidad a cada país. “A pesar de que somos un país pequeño, somos regionalistas, por lo que debemos salvaguardar y hacer enriquecer nuestro folclor”